विवे य देजा विविर

Bonjour a todo el world! (BIEN, EMPEZASTE HABLANDO TRILINGUEMENTE!). Tengo la terrible costumbre de dejar abandonado este blog y de la nada retomarlo. Es que siempre termino sintiendo que me falta ALGO. Escribir acerca de mis pensamientos, de mis ideas. De sentir que alguien me está escuchando y que lo que pasa por mi cabeza no se va a quedar ahí.
El transcurso de mi mañana fue totalmente normal, hasta que surgieron una serie de hechos que no vienen al caso pero que me hicieron un click y me hicieron pensar muchisimo acerca de por qué seguimos al lado de las personas que nos hacen mal. Por qué insistimos en lo que nos hace daño (gracias Arjona, aunque no te banque a veces tenés razón). Nos empecinamos. Pensamos y "queremos pensar" que algo algún día va a cambiar. Lo cierto es que hoy decidí alejarme de todo lo que me hace mal, ponerle un punto final a la gente con mala energía, a no seguir discutiendo con la pared. A no querer cambiar a alguien que no tiene intenciones de cambiar. ¿y cuál es la solución? la indiferencia... se que tal vez suene algo drástico, pero qué mejor manera de que no te golpee nada que no escuchándolo? Porque he comprobado que hay gente que realmente disfruta haciendo sentir mal al otro. Disfruta cuando daña con las palabras. Y no es mi más minima intención tener a alguien de ese calibre cerca y mucho menos en el círculo que me rodea. En un círculo que YO decido que me rodee. Tengo que aprender a canalizar mi energía en cosas que si valgan la pena y que lo merezcan. Suelo poner todo de mi en cosas inútiles, cuando bien podría estar haciendo otras cosas. VIVE y DEJA "VIVIR" es exactamente mi frase de cabecera a partir de este momento.